La era de la desinformación
posverdad, noticias falsas y otras trampas
Este libro plantea una serie de preguntas destinadas a "comprender mejor el mundo para transformarlo y mejorar la vida". El resto, dice Marco, son detalles. Sin embargo, "el diablo, el padre de la mentira, vive en los detalles". Y yo diría que uno de ellos expresa nuestra mayor dificultad. Porque la tarea esencial de "desmitificar a los mistificadores" no se logrará "desenmascarando sus mentiras, demostrando que se benefician de ellas y demostrando que sus argumentos son peores que los de sus críticos": eso sería apostar por lo que Vladimir Safatle llamó una vez "la Ilustración ingenua". Pero los elementos que aporta el libro nos permiten ver que el problema es mucho más profundo, y que esto, en lugar de desanimarnos, debería llevarnos a pensar en maneras de “combatir la mala fe y el autoengaño” e “inventar nuevos usos para el big data, comprometidos con el bien común”.