Gente que la calle conoció
Nuevamente Ediciones Luminaria tiene el gozo de reeditar Gente que la calle conoció, se disfruta el trabajo por ese andar la ciudad espirituana en el reencuentro con seres humanos que habitaron sus espacios.
De esos pintorescos personajes que la calle conoció, unos son simpáticos, otros trágicos o por lo menos dramáticos. Casi todos signados por la pobreza o la miseria extrema, que los hacía recurrir, conscientemente o no, a actitudes que llamaban la atención en las calles espirituanas, lo que hizo —y así lo destaca el autor— que con el transcurso del tiempo pasaran a engrosar la memoria viva de la ciudad, como muestra, en aquellas condiciones, de lo real maravilloso.
Esa gente que la calle conoció, con las características con que las describe Juan E. Bernal, son, como él mismo afirma, «representaciones recurrentes de la vida social en la que palpita la fuerza de su continuo generacional».